Mi amado hijo
Hoy por primera vez no escucharé de tus labios el “Feliz Día `Pa”.
Hoy te escribo la primera carta. En casi 5 meses de tu partida no había podido escribir más de dos líneas seguidas, pero hoy hago de cuenta que este es el regalo tuyo que estaba esperando.
Quiero contarte que aquí muchas cosas han cambiado, todo tiene otro color, la vida tiene otro significado. Con esto que nos pasó me di cuenta que desde antes de tu llegada, allá por el 93, me había planificado totalmente para vos, todo lo que hacía era para tu futuro, alcanzando una aceleración que nunca calculé, que cuando partiste frené tan bruscamente, me bajé de la nave y quedé suspendido en el vacío.
Cada mañana cuando me despierto y me doy cuenta que ya no estás en tu habitación, me invade una amargura y un nudo en la garganta que se repiten varias veces en la jornada, me voy despertando en llanto hasta estallar en la ducha. Mamá me tiene mucha paciencia, aunque sé que ella pasa por una situación similar. Tus hermanitas son mágicas... ¿vos tenés algo que ver con esto?... nos mantienen de pie y nos sacan esa loca idea de irnos contigo...
La familia también es muy diferente, ya no es el torbellino que vos imponías, ahora todo es calmo, mucha paz y reflexión, como digo es “la otra familia” en la que espiritualmente estas en todo momento. Extrañamos tu presencia física, tus cosas están quietas, la mayoría en el lugar donde las dejaste, y vemos en cada rincón tus huellas y tus marcas.
Tus amigos te visitan, te extrañan, nos cuentan algunas anécdotas que vos no nos habías contado, algunas muy graciosas...
Quiero creer que tenés que ver con la cantidad de causalidades que nos suceden a diario?? , el cruce casual (causal) con gente que no conocemos que dicen cositas... la cagada de la gaviota bajo la sombrilla, los aplausos en el momento en que pasábamos por la parroquia, las palabras del sacerdote en tu misa del 2do mes, tu foxterrier (Loli), la que de contrabando hacías dormir con vos tuvo cuatro cachorros y eligió tu pieza para ello, y cuantas más... tenés que ver con eso??? Decime que si...
En este tiempo he aprendido bruscamente de la vida lo que en mas de 40 años no había si quiera imaginado: dolor, sufrimiento, impotencia..., espiritualidad.
Trataré de sobrellevar este día tan difícil...
Gracias por este regalito y tu “feliz día `pa”... lo escucho..., hasta siento el abrazo apretado que sabías darme... lo siento...
Te amo,
Papá.
Hoy por primera vez no escucharé de tus labios el “Feliz Día `Pa”.
Hoy te escribo la primera carta. En casi 5 meses de tu partida no había podido escribir más de dos líneas seguidas, pero hoy hago de cuenta que este es el regalo tuyo que estaba esperando.
Quiero contarte que aquí muchas cosas han cambiado, todo tiene otro color, la vida tiene otro significado. Con esto que nos pasó me di cuenta que desde antes de tu llegada, allá por el 93, me había planificado totalmente para vos, todo lo que hacía era para tu futuro, alcanzando una aceleración que nunca calculé, que cuando partiste frené tan bruscamente, me bajé de la nave y quedé suspendido en el vacío.
Cada mañana cuando me despierto y me doy cuenta que ya no estás en tu habitación, me invade una amargura y un nudo en la garganta que se repiten varias veces en la jornada, me voy despertando en llanto hasta estallar en la ducha. Mamá me tiene mucha paciencia, aunque sé que ella pasa por una situación similar. Tus hermanitas son mágicas... ¿vos tenés algo que ver con esto?... nos mantienen de pie y nos sacan esa loca idea de irnos contigo...
La familia también es muy diferente, ya no es el torbellino que vos imponías, ahora todo es calmo, mucha paz y reflexión, como digo es “la otra familia” en la que espiritualmente estas en todo momento. Extrañamos tu presencia física, tus cosas están quietas, la mayoría en el lugar donde las dejaste, y vemos en cada rincón tus huellas y tus marcas.
Tus amigos te visitan, te extrañan, nos cuentan algunas anécdotas que vos no nos habías contado, algunas muy graciosas...
Quiero creer que tenés que ver con la cantidad de causalidades que nos suceden a diario?? , el cruce casual (causal) con gente que no conocemos que dicen cositas... la cagada de la gaviota bajo la sombrilla, los aplausos en el momento en que pasábamos por la parroquia, las palabras del sacerdote en tu misa del 2do mes, tu foxterrier (Loli), la que de contrabando hacías dormir con vos tuvo cuatro cachorros y eligió tu pieza para ello, y cuantas más... tenés que ver con eso??? Decime que si...
En este tiempo he aprendido bruscamente de la vida lo que en mas de 40 años no había si quiera imaginado: dolor, sufrimiento, impotencia..., espiritualidad.
Trataré de sobrellevar este día tan difícil...
Gracias por este regalito y tu “feliz día `pa”... lo escucho..., hasta siento el abrazo apretado que sabías darme... lo siento...
Te amo,
Papá.
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